domingo, 24 de abril de 2016

HIJO sin nombre.




-¡Enciende la luz, por favor, enciéndela que hace frío!
¿Madre? ¿Estas allí? ¿Por qué no me haces caso?
Tengo miedo, no puedo dejar de tiritar y está muy oscuro aquí.
Me siento solo, por favor, abrázame, siento que caigo.
Madre… ¿Es que ya no me amas?
Madre… ¿Qué has hecho? ¿Por qué no has permitido que te mirara a los ojos?
¿Por qué no quisiste conocerme?
Te amo, te elegí para que fueras mi madre y me ayudaras con mis primeros pasos y secaras mis lágrimas. El día de mañana hubiera hecho lo mismo por ti.
Para que riéramos, jugáramos, creciéramos juntos…
Ibamos a ser felices.  
¿Pero sabes Madre?…te perdono.
Y ya no te angusties, no llores.
Ve tranquila que aquí se hizo la luz y muchos niños y niñas comenzaron a rodearme. No estoy solo. Siento calor otra vez.
Gracias por esos días en tu vientre.
Solo una pregunta: ¿Como me hubiera llamado? 
Ya no importa madre. 
Adios...
Tu hijo sin nombre

 



No hay comentarios.:

Publicar un comentario